El problema de las .com, a parte de una valoración desorbitada de su valor real, fue que el modelo de negocio no era tan fuerte como parecía: basado principalmente en los ingresos por publicidad y en la generación de contenido atrayente para los usuarios. Esto llevó a muchas empresas a la necesidad de contratar personal que nutriera de contenido a los portales y retuvieran a los usuarios ... Detrás de estás empresas, grandes sumas de capital riesgo invirtieron ingentes cantidades a la espera de un retorno de beneficios a corto igualmente exuberante. Sin embargo, al contrastarse que el modelo de negocio no se diferenciaba en realidad mucho del tradicional y que lo que había cambiado era el medio, estalló la burbuja.
¿Cuál es la diferencia a día de hoy? El usuario ha cobrado un papel fundamental, que con sus micropagos, generación de contenidos y necesidades de información, han revolucionado el panorama. ¿Qué es Facebook? "Una red social" Sí, ¿pero qué es realmente? Un sitio en el que la gente comparte su fotos, ideas, sus preferencias, sus opiniones ... Facebook es sólo una herramienta. Cómo tal, no aporta más valor que funcionalidades y su principal interés es conocer las necesidades de sus usuarios ... que no son otras más que compartir conocimiento. ¿Y gmail, googledocs ...? ¿Y linkedin? La web 2.0 se caracteriza porque es el usuario el que ha tomado el control, el decide quién se queda y quién se va ... o al menos eso cree.
Así pues nos encontramos con que cada día, el volumen de información que Internet contiene crece a un ritmo sin precedentes en la historia de la humanidad. De seguir así, empezaremos a llevar poca información con nosotros y tenerla toda disponible en la nube. Y este es el futuro que nos auguran los gurús: todo conectado, todo compartido, todo en la Red.
Aunque todavía esta por ver como generará beneficios Facebook: ¿publicidad?, ¿perfiles business? ... y sin olvidar al resto de las redes sociales, parece evidente que han venido para quedarse. Pero supongamos que los augurios se cumplen y todo está en la red. ¿Qué ocurrirá si uno de estos gigantes se tambalea? ¿Lo rescatarán los gobiernos como se han rescatado a los bancos? Sin duda no es una idea descabellada, al fin y al cabo, ¿qué es lo habría de salvarse? Lo que ha día de hoy se le ha denominado en muchos foros Capital Social.
Éste es sin duda un interesante concepto que veremos si realmente ha venido para quedarse o se volatilizará cuando una crisis sacuda al fenómeno de las redes sociales. Y si alguien duda de que habrá una crisis no hay más que mirar las cifras que los fondos de inversión están inyectando a todos estos negocios y el volumen de las operaciones de adquisiciones que se están llevando a cabo justo en un momento en el que la economía mundial está viviendo una de sus peores épocas.
¿Viviremos una WWW crisis?
